¿Qué es la motivación en derecho penal?

Ejemplos de derecho de los motivos

En el Derecho Penal un delito sólo es punible si se trata de un acto realizado o cometido con plena intención y preparación. Para ello, el Tribunal procede a descubrir el motivo de la persona, para llegar a sus fines, es decir, la intención. Si existe una prueba clara del motivo del acto cometido, esto dará un apoyo extra a la conclusión del tribunal, pero la ausencia de motivo no conduce necesariamente a lo contrario.

El motivo es el estado de ánimo que impulsa a una persona a desarrollar una intención. En otras palabras, el motivo se representa como una intención no expresada. El motivo se trata como un indicio o la causa subyacente a la intención. El motivo de una persona puede deducirse analizando diversos factores que contribuyeron a la comisión del delito.

Cuando hay presencia de pruebas circunstanciales, la ausencia de motivo puede resultar una condición favorable para el acusado, pero en caso de que haya pruebas directas, el motivo se vuelve irrelevante.

En el caso de Tanviben contra el Estado de Gujarat AIR 1997 SC 2193, el Honorable Tribunal Supremo sostuvo que si las pruebas del asesinato son fiables, se puede dictar sentencia condenatoria, aunque no se establezca el motivo. Sin embargo, en los casos en los que existen pruebas circunstanciales, el motivo adquiere una importancia vital que en los casos en los que existen pruebas directas.

Lee más  ¿Qué dice el artículo 308 del Código Penal?

Ley de intenciones

La ley distingue técnicamente entre motivo e intención. En el derecho penal, “intención” es sinónimo de “Mens rea”, es decir, el estado mental que demuestra la responsabilidad y que la ley impone como elemento de un delito[3] “Motivo” describe, en cambio, las razones de los antecedentes y la posición en la vida del acusado que supuestamente han inducido al delito. Los motivos suelen dividirse en tres categorías: biológicos, sociales y personales[4].

Hay dos objeciones al motivo cuando se considera el castigo. La primera es la objeción volitiva, que es el argumento de que la persona no puede controlar sus propios motivos y, por tanto, no puede ser castigada por ellos. La segunda objeción es la objeción de neutralidad. Se basa en la idea de que nuestra sociedad tiene opiniones políticas contrastadas y, por lo tanto, la preferencia del gobierno debe ser limitada[5].

Definición de la ley de motivos

Las motivaciones del comportamiento delictivo varían. Los índices de delincuencia en las zonas afectadas por la pobreza suelen ser más elevados, por ejemplo, porque la gente puede recurrir a medidas drásticas cuando cree que no tiene recursos económicos para sobrevivir. Otras motivaciones para la actividad delictiva pueden ser la venganza, la emoción de cometer un delito, una enfermedad mental o una adicción.

Los profesionales de la justicia penal deben familiarizarse con todos los tipos de delitos y con lo que motiva a algunos a elegir este estilo de vida, así como con la forma de identificar a los delincuentes, detenerlos y llevarlos ante la justicia. Continúe leyendo para explorar siete áreas clave de la delincuencia, conocer su prevalencia en los Estados Unidos y descubrir cómo puede posicionarse para tener un impacto positivo en el campo de la justicia penal.

Lee más  ¿Qué significa actividad valorativa?

Internet ha proporcionado a los delincuentes una forma totalmente nueva de explotar a las empresas y a los individuos para su propio beneficio personal. La ciberdelincuencia puede definirse como las actividades delictivas realizadas a través de un ordenador e Internet.

Lo que hace que la ciberdelincuencia sea difícil de litigar es que la tecnología de Internet permite cometer delitos desde cualquier parte del mundo. El hacker que ha vaciado su cuenta bancaria puede ser su vecino de al lado o alguien del otro lado del mundo.

Ejemplo de motivo en derecho penal

El motivo suele utilizarse en relación con el DERECHO PENAL para explicar por qué una persona actuó o se negó a actuar de una manera determinada; por ejemplo, para apoyar la afirmación de la fiscalía de que el acusado cometió el delito. Si una persona acusada de asesinato era el beneficiario de una póliza de seguro de vida del fallecido, la acusación podría argumentar que la codicia fue el motivo del asesinato.

La prueba del motivo no es necesaria en un proceso penal. A la hora de determinar la culpabilidad de un acusado penal, los tribunales no suelen preocuparse por el motivo por el que el acusado cometió el presunto delito, sino por si lo cometió. Sin embargo, el motivo del acusado es importante en otras etapas de un caso penal, como la investigación policial y la sentencia. El personal de las fuerzas del orden suele tener en cuenta los posibles motivos para detectar a los autores del delito. Los jueces pueden tener en cuenta los motivos de un acusado convicto en la sentencia y aumentar la condena basándose en motivos avariciosos o reducir la condena si los motivos del acusado eran honorables, por ejemplo, si el acusado actuó en defensa de un familiar.